Un punto muy importante para el uso sin problemas de las herramientas de descortezado es el uso de una placa base de metal duro que se adapte al contorno exterior de la placa de descortezado. Por un lado, proporciona a la plaquita de corte el apoyo necesario en el asiento de la plaquita y, por otro lado, protege la superficie de contacto en el asiento de la plaquita contra la deformación y las hendiduras. Además, la placa base de MDI evita que los portaherramientas sean rozados por el impacto de la viruta, lo que suele ocurrir en los procesos de descortezado debido al posicionamiento del cabezal de descortezado. En principio, el filo de corte secundario debe alinearse con precisión con el eje de la pieza durante el proceso de descortezado. Un filo situado por debajo del centro de giro provoca vibraciones. Un filo de corte situado sobre el eje de la barra provoca una alta presión de corte, el endurecimiento de la superficie de la barra y la deformación plástica de la plaquita de corte, lo que finalmente repercute negativamente en la vida útil de la plaquita. La posición correcta del filo de corte en el centro de la barra se puede conseguir utilizando láminas espaciadoras de diferentes espesores. La ausencia de marcas de desgaste en el chaflán de apoyo, el astillado del filo de corte y el desgaste exajerado del rompevirutas son indicaciones de un filo de corte posicionado por debajo del eje de la pieza. Un desgaste extremo en el chaflán de apoyo pero poco en el rompevirutas, por otro lado, indican que el filo de corte está posicionado por encima del eje de la pieza.
El uso de placas base de MDI evita los desprendimientos, las deformaciones y las hendiduras en el portaherramientas
Placas base adaptadas al contorno exterior de la plaquita de corte